15.- Papá, a veces el amor se acaba

La verdad es que mi hija pequeña me sorprende a veces con sus comentarios. No digo que la mayor no me sorprenda, que también, sólo que esta me sorprende con sus cosas esas de la "edad del pavo". Que no deja de causarme también sorpresa esa expresión. Edad del pavo. ¿Qué tendrá que ver un pavo con esa insufrible etapa de la vida de cualquier persona en la que te empiezas a hacer mayor y te crees al más feo, gordo, listo y valiente (todo esto esn su acepción más tonta)?¿ Y quién acuñó esa frase?¿ Un criador de pavos? Hablaremos más sobre el tema.

-Papá, a veces el amor se acaba. Esto es lo que me dijo mi pequeña.

Igual eso es lo que le pasó a Paca. Se cansó de quererme y se apagó su amor. Igual se ha muerto de amor. Igual no se ha ido, sino que se ha muerto. Eso sería tremendo, porque no sabría que hacer sin ella. ¿Existe una sercción de conciencias en el Opencor?

- Buenas tardes.
- Muy buenas, ¿qué desea?
- Pues mire. El otro día me quedé sin conciencia. Bueno, yo la llamo Paca. El caso es que derepente se fué y no ha vuelto. He pensado que igual se ha muerto. No sé, ¿se le ha muerto a Ud. alguna conciencia?
- Pues no he tenido el gusto. ¿La daba una buena alimentación? Lo digo porque es raro que se le muera la conciencia así de golpe. Sin avisar
-Yo creo que sí. Hablabamos bastante. En muchas cosas eramos muy críticos, pero tenía sentido del humor. Bueno, y sentido del malhumor también tenía.
- Humm, ya, ya.
- El día que se fué fue por que le dije que con tanto calor me estaba aplatanando y que pensaba que ella me quería comer. ¿Sabe? Al estar aplatanado, yo era como un plátano y que ella me comería como una mantis...
- Ya le vale. ¿Cómo puede usted decirle eso a, como decía que se llamaba, Paca? Con lo sensible que son las conciencias.
- Ya, pero yo la quería mucho. Era mía y, y,....
- Caballero, hay amores que matan
- ¡Pero yo no quería matarla!
- Y ella a Ud. seguro que tampoco. Y ya vé, ahoraen vez de matarle, se le ha muerto
- ¿Ud. cree que de verdad se ha muerto?
- No me extrañaría. ¿ Se encuentra Ud bien? Está un poco amarillo
- Ya. Es que tuve fiebre los últimos días
- Ahhh, pensé que se estaba conviertiendo usted en plátano
- ¡Oiga!
- No se lo tomé usted así. El otro día un cliente se enfadó tanto y se puso tan rosa, que se convitió en fresa.
-¿En fresa?
- Como se lo digo. En fresa. Y de la cabeza se salieron hasta esas hojas verdes de la fresa.
- Vaya cosa. No, lo mío creo que es por la fiebre y creo que fué por Paca. Bueno, ¿ tienen o no conciencias para venderme?
- Tendría que mirar en el almacén. ¿Y cómo la querría?
- ¿Qué modelos tiene?
- Bueno, la gran mayoría vienen pregrabadas, ya sabe. Conciencia de izquierdas, de derechas, tengo alguna, creo, especial para deportístas...
- No esa no me apetece mucho. Y dígame, ¿no tiene Ud. alguna, no sé como llamarla, ...virgen?
- ¡Uy, esas son las más caras!¡ Y se hacen bajo pedido! De tres a cinco meses. Es que hay mucha demanda, sabe.
-¿Hay mucha demanda, dice?
- Muchísima. Pero la gente la pide generalmente como complemento a la suya. Ya sabe Ud. que la educación en estos tiempos deja mucho que desear.
- Ya claro. ¿Y se pueden poner en gente a la que se la ha muerto la suya y se ha quedado sin ninguna?
- Miré Usted, a tanto ya no llego. Tendría que mirarlo en el libro de instrucciones o en las especificaciones técnicas, pero le advierto que si no le funciona, el dinero no se devuelve. Si acaso se le cambia por vales de consumo pero en el mismo centro que hizo la compra. La gente que la compra como complemento nunca nos las devuelve. A ellos les funciona.
- Ya entiendo. Bueno, me gustaría encargar una nueva, sin programación. ¿Son dificiles de incorporar?
- ¡Qué va! Incorporación intuitiva. Muy fácil. La tecnología ya se sabe. ¿Le encargo una entonces?
- Pues, yo creo que sí
- Perfecto. No se arrepentirá de su compra. Me deja la receta por favor.
- ¿Receta?¿Qué receta?
- Si, la receta del psiquiatra.
- No tengo esa receta, de hecho, no sabía qu.....
- Mire. Vaya a que le vea un loquero, porque esta usted majara. Lleva aquí 10 minutos diciendo tonterías de su conciencia, que se ha muerto o nos se que leches de su Paca. Ya nos hemos bacilado un ratito, pero ahora tengo que trabajar, por lo que déjeme en paz. Váyase o haga alguna compra o me veré obligado a llamar a seguridad pare que le echen.
- Pero ha estado usted...
- He dicho lo que usted quería oir dentro de su locura. Pero ya se acabó. Se pasó el tiempo. Ciao. Orfidesen. Bye
- No...no...usted,....yo...
- Jiménez. Hagase revisar la cebeza y verá como recupera su conciencia. Tiene razón su hija. Cuiede el amor o se acabará
-vale, vale....Perdón,¿ al menos podría decirme donde está la sección de monos?