4 oct 2007

Como vino se fue

No hablo del vino. Del vino, vino, del beber (que si beber es con "b", vino de beber debería también escribirse con "b": bino. Suena mucho más a "bino" cuanto más hayas bebido o vevido).
Me refería a Paca. Se ha tomado tan a pecho lo de buscar las esquinas de los espejos deformados que..... Cómo vino se fue, la muy cabrona.
El caso es que creo realmente que no hable con Ana, que si algo me gusta de ella, o sea, casi nada, es su nombre. Seguro que es por ser capicúa, que en el fondo es como mirarse en un espejo, aunque este sea normal y no deformado o deformante. Te miras y te ves, claro (salvo que seas o vayas ciego), luego, al verte, eres un poco capicúa. A veces, también un poco gilipollas. Al mirarte digo. Hya domingos que es mejor no mirarse.

- ¡Joder ( dígase en un tono parecido a una exclamación lastimera. Algo como "joód//er". Las rayitas son como una pausa). ¡Vaya careto!
- No veas como ibas ayer. No me extraña que tengas esa cara. ¿Has visto que hora es?

Esta es la frase típica de Paca. Siempre como de reproche, dádote en el bebe o bebé ( en el fondo no eres más que eso) o en el veve. Pa' jorobarte.

- Vale. Para. No,... no volveré a beber ( lease como vever, aunque te duela en los ojos)
- Eso dices todas las semanas
- No es verd... verdad.

En ese momento caí. Si te dicen que caí, es verdad. Caí. No era Paca. Claro, Paca se había ido a buscar que se yo que parte del espejo en que se yo que parte del mundo. Igual ahora está abriendo otra webblog o como se diga, para contar sus movidas y movidas alrededor del ancho mundo de las conciencias y disconciencias (www.historiasdelapaca.blogspot.com ). El caso es que me dió la sensación de que no era ella, la extraña sensación de que era.... Rocío. Sí, Rocío, mi señora, quién decía eso. Lo cual me pataleó el cerebro duramente.
- No, no. Estoy bien. Lo digo de veras lo de que hoy.... lo dejo. Ro... Rocío
No es que mi santa me de miedo, que me lo da. Ni que lo dijera con retintín ( y eso que creo que lo dijo con rintintin porque oí varios ladridos que venían de la habitación), que lo dijo. Porque se puede decir algo con un sentido determinado, para que cree en el otra un precisa reacción o sentimiento (en mi caso generalmente es de culpa y a veces de resignación), pero decirlo con retintín me parece muy fuerte. Re tin tín. 2 veces Tintín. Si ya era un poco pesao el cahvalote ese del kiriki en la cabeza, imagínete dos. Al estilo, Hernández y Fernández. Dos Milús... Dos Tintines, Bufff. Dos capitanes Hadock?. Esor sería lo único bueno. Seguro que entre los dos meterían al ton** del Bush es serios aprietos. Lo mejor de ellos sería cuando "cascarrabiearan (???)". De su boca salían sapos, culebras, bombas (de esas de las redondas con mecha y todo) en insultos del tipo "hjhjh//***+++%&···=" solo que mejor, porque en el fondo Hergé era un genio y yo no, aunque estoy por descubrir. Con eso harían más que .... Chavez, por ejemplo.
El problema era que por un momento pensé que... Pensé que,.... No, un momento, eso es imposible. No, no tiene lógica. Rocío no puede ser Paca. No, es imposible.
- Te he oido decir eso cantidad de veces. Tu verás lo que haces, pero ya no estás en edad. No eres tan joven como piensas.
¿O sí?. Dios. Puedes, querido lector (aunque en realidad no te quiero para nada ni por nada) que resultase que el binomio Paca-Rocio fuera un "uninomio" mío. O sea, Paca= Rocío y yo sin saberlo todos estos meses. O años.
Tendría Paca a la edad en que conicí a mi parienta. Esta palabra siempre me suena a diente. O muela. Parietal- Yo soy el perietal de mi señora. ¿Mía?
¿Es que me estoy volviendo majareta, o simplemente idiota, y no me he dado cuenta de ese binomio loco? O, ¿igual era un trinomio? ¿ Y si Rocío era también el mono, el hijoputa ese que me robaba las llaves? ¡ Pero si el mono también era Rocío, ¿ por qué me robaba las llaves? ¿Las había perdido? Y si las había perdido, ¿Por qué no se hacía otro juego? Porque esto no era un juego. Me refiero a lo de que me robará las lla.... De pronto, decidí salir de dudas. pero para entender bien el concepto de "salir de dudas", primero hay que entender el de "entrar en dudas". No "entrar de dudas" que se parece mucho a "entrar deudas" que es lo que más entra en mi casa, o "entrar de dudas" que debe ser como entrar en cuclillas porque cuando entras así entras en la duda de si está despierta o dormida, pues si no entrarías "andando". Vamos digo yo. Igual cuclillas y dudas están muy relacionadas y significan lo mismo... Y si están relacionadas... tendrán dudillas, porque cuclillas ya tienen.
A lo que iba, que dudas debe ser un pueblo o así. Como Oregón, Tejas, o Cincinatti. O una habitación. En cualquier caso es un sitio o un estado porque hay que entrar primero para poder salir, digo yo. Yo o Paca o Rocío, pero alguién lo dirá. Y si es un sitio o un estado, seguro que es americano y el Bush (yorch) tendrá mucho que decir, con lo que quien tiene que decir algo definitivamente respecto al tema de las dudas somos Yo, jorch, Paca o Rocío. Con lo que si todos tenemos algo que decir igual todos somos lo mismo. Todos somos yo, o yo soy todos ellos. Con lo que igual ellos no existen y existo solo yo. O viceversa. O lo peor Rocío es Yorch y yo estoy viviendo con ella/él. ¡Dios!, yo viviendo con Bush. ¡ Y durmiendo con él! O peor aún, si todos somos uno mismo.... yo soy yorch.
Terror. eso fue lo que sentí. Entonces, más que nunca, decidí salir de dudas. Al tiempo que salía de dudas, salí corriendo en dirección hacia Rocío. Cuando llegué, me avalancé sobre ella y la olí el sobaco. Aparte de una hostia, no olí nada más. Bueno, la hostia no la olí. La recibí. Pero te diré, que la recibí con dolor pero con cierto agrado. Al menos Rocío no era el mono. No olía a mono y entoces deducí que no lo era. También me ayudó en la decisión el ver en la oscuridad de la habitación, casi a oscuras, una sonrisa llena de dientes y unos ojos algo saltones. Era el mono. Yo podría ser Yorch, pero nunca un mono (por eso lo ví) y mi señora tampoco (por eso me dió la hostia). Creo que al salir de dudas, salí también de esa especie de estado de trance que me caracteriza en estos momentos. Mis hijas lo llaman estupidez. Rocío también. Me dí cuenta de que mi señora no era Yorch (bush) pues este en vez de darme un tortazo me daría un bombazo.
Así pues, me di cuenta de que en el espejo del cuarto de baño no encontraría las respuesta a mis problemas. No deformaba nada, sino que era yo el deformado. Y lo rompí. ¿Que qué sucedió? Pues que me lleve otra hostia. Por romper el espejo. Pero quie me la dió ahora no fue mi parietal, sino el mono. Y me movió una muela del golpe, digo del juicio. Quiero decir, que del golpe me movió una muela del jucio. Y volví a caer. Si te dicen que caí, diles que si. Que caí otra vez, aunque esta vez al suelo. Pero me di cuenta de otra cosa. O de dos. Bueno, de tres :
Una es que no veas lo duro que esta el suelo. Al menos el de mi baño.
Dos, que si tengo una muela del juicio y hubo una vez que tuve cuatro, significa no solo que tuve cuatro jucios sino que Paca es una muela y hubo una vez que tuve cuatro Pacas, pues.
Y tres. Ehhhh. Ah, si. Que lo que le dió mucha rabia al mono, tanto como para sacudirme un golpetazo en la jeta, es que rompiera el cristal del espejo del baño. ¿Por qué? Pues ni puta idea. Igual era una especie de espejo/ventana transaccional univocamente bidimensional o algo parecido por donde el cabrón del bicho se iba a dar sus rulos. Lo digo básicamente porque no tengo otra cosa que decir, pero también porque al levantarme me encontré con las llaves de mi casa, unas zapatillas viejas que eran de mi padre y que hacía tiempo que no veía, y un libro de instrucciones de mi lavadora zanussi junto con otro de Kierkegard. Lo raro es que ambos estaban atados con lazo de raso así muy mono. Comprendí, o dí por supuesto, que además de ser esa ventana rarísima que he dicho unas líneas más arriba, también era una especie de hucha o armario monil de todo lo que el mono loco me robaba. Diré, en honor a la verdad, que me preocupó bastante el estado de salud mental del animal. Vamos que estaba loco. ¿Aquien si no se le ocurre robar el libro ese del tal zanussi titulado "manual de instrucciones de la lavadora MZ-36H" , pero sobre todo uno de Kierkegard, y no contento con eso lo anudas con un lazo de raso rojo. ¡Ah, y una liga! la última del madrid.
De todas formas, no me costó mucho romper el espejo ( o he de decir romper con el espejo). Por que no está loco un espejo que cuando tú te miras en él y señalas a la izquierda, p. ej, con tu brazo izquierdo, él te mira y señala hacia la izquierad con su brazo derecho. ¿Qué no? Haz la prueba.
De todas formas creo que dudas está un poco mas allá del rio Pecos. El de las pelis del oeste.

1 comentario:

nicol dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.